“Registrar el escritorio” suele entenderse como grabar en vídeo lo que ocurre en la pantalla del ordenador. Esta técnica es útil para hacer tutoriales, mostrar un problema de software o guardar una videollamada.
1. Elegir un programa de grabación
En la mayoría de sistemas operativos puedes usar herramientas integradas o aplicaciones de terceros:
- Funciones de grabación de pantalla incluidas en el propio sistema (en algunas versiones de Windows y macOS).
- Programas especializados que permiten ajustar la resolución, la zona de captura y la fuente de audio.
2. Ajustar qué se graba
- Elige si quieres capturar toda la pantalla o solo una ventana concreta.
- Activa la grabación del micrófono si necesitas explicar lo que haces.
- Comprueba el espacio libre en el disco antes de iniciar una sesión larga.
3. Guardar y compartir
- Al terminar, detén la grabación desde el propio programa.
- Guarda el vídeo en un formato habitual (por ejemplo, MP4).
- Revisa el resultado antes de compartirlo, especialmente si en la pantalla aparecen datos personales.
Los pasos concretos dependen del programa que utilices, por lo que conviene consultar también la ayuda oficial de la herramienta de grabación que elijas.
