Crear aplicaciones para iPhone implica combinar diseño de interfaces, programación y pruebas cuidadosas. El entorno oficial para desarrollar en iOS es Xcode, disponible para macOS, y los lenguajes más utilizados son Swift y, en proyectos heredados, Objective C. Después de instalar Xcode puedes iniciar un nuevo proyecto, elegir una plantilla (aplicación vacía, app con pestañas, etc.) y configurar los datos básicos de la app.
El siguiente paso consiste en diseñar la interfaz de usuario con SwiftUI o con los editores de interfaz clásicos. Allí defines pantallas, botones, campos de texto, listas y todos los elementos con los que interactuará el usuario. Conviene pensar en un flujo sencillo: pantalla de inicio, navegación entre secciones, mensajes de error claros y confirmaciones cuando se realiza una acción importante.
En paralelo irás escribiendo el código que conecta la interfaz con la lógica de la aplicación: manejo de datos, llamadas a servicios web, almacenamiento local, autenticación, etc. Las bibliotecas estándar de iOS cubren muchas necesidades comunes, y existen también frameworks de terceros que pueden acelerar el desarrollo, siempre respetando las políticas de Apple.
Antes de publicar es imprescindible probar la app a fondo, tanto en el simulador de Xcode como en dispositivos físicos. Deberás comprobar el comportamiento en distintas versiones de iOS, gestionar permisos (cámara, ubicación, notificaciones) y vigilar el rendimiento y el consumo de batería. Apple exige también que se respeten sus directrices de diseño y contenido, por lo que es recomendable revisarlas con detenimiento.
Para subir la aplicación al App Store necesitas darte de alta en el Apple Developer Program, crear una ficha en App Store Connect con capturas de pantalla, descripciones y categorías, y enviar la app para revisión. Como alternativa, existen frameworks multiplataforma que permiten desarrollar a la vez para iOS y Android partiendo de una única base de código, pero la publicación en la tienda de Apple seguirá utilizando el mismo proceso de validación y revisión.